Historia del desarrollo de los juegos de azar en Argentina
El origen de la cultura de los juegos de azar
La aparición del juego en Argentina se originó por la influencia de la cultura española. Durante la era independiente, el deseo y gusto por los juegos de azar se mantuvo e incluso se incrementó.
Argentina ha sido históricamente amigable con casi todo tipo de juegos de azar, desde carreras de caballos y loterías hasta apuestas deportivas y casinos. Jugar era una forma de socializar, divertirse y ganar un poco de dinero para pagar deudas. En pueblos pequeños y ciudades se apostaba jugando dados, cartas, dominó, lotería, billar, la ruleta, entre otros.
Durante el Renacimiento se crearon una gran cantidad de casinos, donde el póquer y otros tipos de juegos de azar fueron la principal atracción.
La primera lotería legal en Argentina apareció en 1812, poco después de que Argentina se independizara de España. Varias agencias han controlado la Lotería Nacional desde 1893, lo que significaba que supervisaban las licencias y las regulaciones.
Desde el siglo XIX apostar en carreras de caballos se convierte en un pasatiempo nacional y se realiza el primer Derby Nacional de Argentina en la pista más antigua del país en Palermo.
El primer casino terrestre de Argentina se construyó en 1912 y encontró su hogar en Buenos Aires. El Club Tigre, en la ciudad norteña de Tigre, aparentemente estaba destinado a ser un centro social. Además de los casinos tradicionales terrestres, hay los que están ubicados en los cruceros, como el Casino de Buenos Aires, que se encuentra en la cubierta del Estrella de la Fortuna.
Regulación de juegos de azar en Argentina
En Argentina la actividad de los casinos está descentralizada, por lo que se regula según una provincia determinada. Como inicio de la regulación de la industria del juego en Argentina podemos considerar el año 1999. La Corte Suprema del país dictaminó el 31 de mayo de 1999 que la regulación de los juegos de azar (loterías, juegos de casino, bingo y tragamonedas) no es un asunto nacional. El estado en este sentido sólo se ocupa de los asuntos relacionados con los delitos, así como la conducción de la Lotería Nacional.
Así que, cada provincia de Argentina determina de forma independiente qué juegos están prohibidos en su territorio y cuáles están permitidos. Actualmente, Argentina tiene 23 provincias y 1 región autónoma metropolitana. Cada región del país ha adoptado sus propias leyes y tiene sus propios reguladores de juegos de azar, a menudo varias organizaciones o empresas.
La provincia más grande es Buenos Aires. La misma región del país menciona explícitamente los juegos de azar en su Constitución.
Estatus legal de casinos online
Argentina fue uno de los primeros países en promulgar una ley sobre juegos de azar en línea y legalizar este sector de la industria del juego en 2002. Pero ya en 2008, se intentó prohibir por ley el funcionamiento de casinos en línea, incluidos los offshore. Sin embargo, al año siguiente se canceló la prohibición. Argentina ciertamente necesitaba actualizar sus leyes de juegos de azar en Internet, que eran bastante vagas en la actualidad.
Las leyes de juegos de azar y casinos en línea en Argentina no han sido claras desde 2008, cuando fracasó una propuesta gubernamental de prohibición de los proveedores extraterritoriales. En lugar de cerrar los ojos a esta situación, Argentina, en cambio, centró su atención en la concesión de licencias y la regulación para evitar que parte del efectivo se inunde fuera del área.
Desde entonces, el mercado de los juegos de azar en línea y offline en Argentina se ha legalizado, las licencias se emiten por decisión de las autoridades provinciales. A partir de 2021, todo tipo de juegos de azar están permitidos en el estado, tales como casinos, máquinas tragamonedas, apuestas deportivas, carreras de caballos, loterías y otros.
Conclusiones
La industria de los juegos de azar en Argentina es rica con una variedad de casinos y juegos de azar excelentes para ofrecer a sus residentes locales y turistas visitantes. Hoy en día, Argentina sorprende con sus altas tasas de crecimiento en la industria del juego. Sin embargo, este crecimiento apenas se controla debido a que no existen leyes nacionales que regulen el juego.